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AGUA POTABLE EN COVID19
Written by silvertubos

Acciones Urgentes para los prestadores de servicio de Agua Potable y Saneamiento Frente al COVID-19

Los servicios de agua potable y saneamiento son esenciales para dar cumplimiento a las recomendaciones de las autoridades sanitarias a nivel mundial sobre el lavado constante de manos y la higiene básica como medida indispensable para evitar la propagación del Covid-19.

El acceso al agua potable en cantidad suficiente y calidad adecuada tiene el potencial de salvar millones de vidas, por tanto, es necesario garantizar la operación ininterrumpida de los prestadores de servicios de agua potable y saneamiento, sin menoscabar la seguridad sanitaria de los trabajadores del sector.

Considerando los desafíos que atraviesan los prestadores de servicios de agua potable y saneamiento en esta época incierta y difícil, la Red del Agua de la Universidad Nacional Autónoma de México y el Centro Regional de Seguridad Hídrica bajo los auspicios de UNESCO compartimos esta notas con el fin de apoyar a los organismos operadores en su toma de decisiones. El documento no pretende ser normativo, sino una guía de acciones que pueden ser adecuadas a los contextos específicos de los prestadores de servicios.

Descargar documento en PDF

Sabes cuál es la mejor tubería para redes de agua potable?
Written by silvertubos

Sabes cuál es la mejor tubería para redes de agua potable?

Es de grán importancia cualquier instalación hidráulica que transporte agua potable debido a la inminente escasez que tendrá a mediano y tal vez a corto plazo el vital líquido, por lo tanto debemos conocer que tuberías son las viables para dicho proyecto hídrico.

Te presentamos para que analices y descargues la «Tabla comparativa de ventajas y desventajas para tuberías en redes de agua potable».

Hacemos una comparación en las que a nuestro parecer son los tubos más importantes en un ared de agua potable como los son los de PVC, PEAD, Ferrocemento, Hierro Fundido, Concreto y Acero.

Te presentamos para que analices y descargues la "Tabla comparativa de ventajas y desventajas para tuberías en redes de agua potable".

Descarga la Tabla Comparativa aquí!

Te damos información de tuberías hidráulicas para redes de agua potable. Aquí!

Fuente: Manual de agua potable y saneamiento, Semarnat, Conagua

CAHRLAS POR EL AGUA UNAM
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La Red del UNAM te invita a las Charlas por el Agua

En el marco del Festival Universitario del Agua

Este próximo viernes 13 de marzo 2020 en las Islas de la Universidad Universitaria

Te dejamos el gráfico informativo y ligas para que te suscribas a las pláticas

Crisis climática, 
¿qué pasa con los recursos hídricos?
(11 a 12 hrs.)
Registro 

Ríos limpios, 
¿cómo los conseguimos?
(13 a 14 hrs.)
Registro 

Calidad del agua, 
¿para quién?
(15 a 16 hrs.)
Registro 

Evento gratuito.

AGUA-EN-MEXICO
Written by silvertubos

10 datos acerca del agua en México. UNAM

El portal de la Universidad Autónoma de México (UNAM), presenta una investigación que arroja datos sobresalientes acerca del uso del agua en México. A continuación enlistamos los 10 datos en el ámbito económico, social y medio ambiental de nuestro liquido vital.

10-datos-acerca-del-agua-en-méxico-unam

  • 1.- Al 2011, las ciudades del país contaban con coberturas del 95.4 por ciento de agua potable y 90.2 por ciento de alcantarillado, según datos de la Comisión Nacional del Agua.
  • 2.- En temas de salud, la diarrea, que puede ser causada por agua contaminada, es la principal enfermedad intestinal en nuestro país. Se calcula que al año se producen 5, 521 casos por cada 100,000 habitantes.
  • 3.- El agua subterránea se usa para el riego de 2 millones de hectáreas y cubre 50% de la demanda de la industria, el suministro de 70% de las ciudades y el de casi toda la población rural.
  • 4.- Se pierde entre el 30 y 50 por ciento del líquido por fugas en las redes de distribución.
  • 5.- De los 13.9 miles de hm3 de aguas residuales que se generan al año, solo se trata un 37.8 por ciento.
  • 6.- La industria extrae 3.3 miles de millones de m3, esto representa el 4.0 % de la extracción nacional.
  • 7.- La agricultura representa el 75.72%, es el principal consumidor de recursos hídricos en el país.
  • 8.- En México existen más de 4 mil 462 presas; 667 de ellas son consideradas como grandes, por su capacidad de almacenamiento.
  • 9.- En nuestro país, la presa de mayor capacidad es la Belisario Domínguez, ubicada en el estado de Chiapas, le sigue la Infiernillo localizada entre Guerrero y Michoacán.
  • 10.- 9 millones de habitantes no tienen servicio de agua potable y 10.5 millones no cuentan con alcantarillado.

Los datos anteriores demuestran la creciente importancia para tomar medidas de conservación del agua y una de las principales es evitar la contaminación de fuentes de agua dulce, porque este líquido es de todos y para todos.

Fuente: Agua Conservación Estudios recursos naturales UNAM

Para evita problemas de fugas te recomendamos usar tubería cédula 40 para alta presión.

HISTORIA-DRENAJE-PROFUNDO-4
Written by silvertubos

Te contamos la historia del Drenaje Profundo de la CD/MX

Obra hidráulica del porfiriato sigue en pie y operando en Zumpango

Obra magna inaugurada el 17 de Marzo de 1900, pero regresemos a los orígenes ya que fue en la época prehispánica, en el siglo XIII, cuando los mexicas llegaron al Valle de México y se establecieron en el islote de Tenochtitlan. Como sabemos éste se encontraba en uno de los cinco lagos que formaban la zona lacustre de lo que es hoy este Valle. La cuenca-cerrada- se alimentaba de las lluvias, de los ríos procedentes de las sierras y de pequeños manantiales. Tal ubicación y características ocasionaron desde entonces inundaciones constantes en las épocas de continuas precipitaciones. Nuestros antepasados, ante semejantes contingencias, dieron muestra de sus conocimientos de ingeniería al emprender obras con el fin de controlar las aguas; principalmente construyeron albarradones o diques, como lo relatan los cronistas españoles, quienes quedaron sorprendidos por los sistemas empleados.

Reconstrucción de la ciudad azteca

En 1521, México-Tenochtitlán cayó en poder de los españoles; así se inició una nueva etapa, que se prolongaría hasta 1821. Una de las primeras ideas de Cortés fue buscar un nuevo asiento para fundar la capital de la Nueva España, pero finalmente se tomó la decisión de reconstruir la ciudad azteca, a pesar del peligro constante de las inundaciones, pues todas las corrientes se dirigían hacia el valle. Pronto los constructores se vieron en la necesidad de buscar soluciones. Durante 1555 ocurrió la primera gran inundación del México colonial y, entre otras medidas, siguiendo las técnicas indígenas, se reconstruyó el albarradón prehispánico, que, aunque brindó cierta ayuda, no bastó para solucionar del todo dicho problema.

Para los años siguientes, las obras del desagüe fueron motivo de preocupación de las autoridades novohispanas, sobre todo cuando arreciaban las lluvias y la amenaza de nuevas inundaciones estaba en puerta. En 1637, se continuaron los trabajos a tajo abierto y, ya en el siglo XVIII, se pensó en la necesidad de hacer un desagüe general. Cuando el barón de Humboldt visitó México, opinó que el problema sólo podría resolverse mediante la construcción de un canal que se dirigiera hacia el lago de Texcoco.

Después de 11 años de lucha armada, el 27 de septiembre de 1821, México despertó como una nación independiente, pero entre los principales problemas que heredó del pasado virreinal estuvo el del desagüe de la ciudad capital. Los nuevos gobernantes debían hacerle frente. Don Lucas Alamán habló de ello ante el Congreso, en 1823, y unos años más tarde advirtió la necesidad de que un organismo técnico-administrativo se encargara de la dirección de las obras; sin embargo, la pobreza del erario y los constantes conflictos políticos impidieron que, por largo tiempo, se atendiera la cuestión del desagüe, o bien que sólo se hicieran trabajos de mantenimiento y reparaciones menores.

Construcción del grán canal

En el año de 1856 el ministro de Fomento, ingeniero Manuel Siliceo, congregó en una junta a 30 personalidades, entre técnicos, políticos, científicos, legisladores y eclesiásticos, con el fin de encontrar propuestas viables. En esta ocasión, fue el trabajo presentado por el ingeniero Francisco de Garay, el que obtuvo la gratificación prometida. La propuesta consistió en la construcción de un gran canal, pero no por el rumbo de Nochistongo, sino que éste terminaría en Tequisquiac; las obras comprenderían un tajo, un túnel y un canal, además se harían tres canales secundarios, el del Sur, el de Oriente y el de Occidente. Ya en tiempos del Imperio de Maximiliano, en 1865, Garay fue nombrado Director General del Desagüe del Valle de México.

Sería hasta el año de 1884 cuando Porfirio Díaz inició su primera reelección que se reanudaron formalmente los trabajos del desagüe-en el túnel, el tajo y el gran canal; entonces se destinaron 400, 000 pesosanuales para las obras y fue el ingeniero Luis Espinosa quien quedó al frente de una Junta Directiva. El adelanto era lento, pues se trataba de una tarea compleja, especialmente en lo referente al túnel y al canal, ya que el tajo estaba prácticamente terminado. La maquinaria con la que se contaba no era la adecuada y, por estas razones el presidente Díaz consideró que tal obra debía quedar en manos de técnicos extranjeros. En 1889, se contrataron varias empresas de capital británico y norteamericano, entre otras, la Mexican Prospecting se encargó principalmente del túnel, y la S. Pearson & Son empezó a trabajar en el canal. En el primer caso, los extranjeros cometieron errores técnicos y al cabo del tiempo advirtieron que la obra no les era redituable; por tales motivos, la coordinación pasó de nuevo a la Junta Directiva, y ésta continuó los trabajos con rapidez. Así, después de muchas vicisitudes, el túnel de 10, 021.79 m quedó oficialmente concluido en diciembre de 1894.

17 de marzo de 1900

El 17 de marzo de 1900 tuvo lugar la inauguración oficial de la magna obra, a cargo del presidente Díaz, quien, junto con sus acompañantes, realizó un recorrido hasta el Tajo de Tequisquiac. Pero, si bien concluía una labor en la que los conocimientos científicos y técnicos habían jugado un papel fundamental, y en la que se habían invertido muchos recursos y esfuerzos, ésta no sería la solución definitiva a la problemática, pues las inundaciones no terminaron.

Al avanzar el siglo XX se pudo advertir que las tareas de drenaje de la capital mexicana resultaban insuficientes; se trataba de una ciudad cuya población había empezado a crecer a ritmo vertiginoso, lo cual -incorporado a los problemas del hundimiento, analizados estos últimos en su relación con las inundaciones y el bombeo de los pozos, por los ingenieros Roberto Gayol y José A. Cuevas-, representaban nuevos retos que debían enfrentar tanto quienes gobernaban la capi- tal, como aquellos dedicados a la construcción. Fue entonces que el Departamento del Distrito Federal hizo frente a las inundaciones mediante nuevas obras de ingeniería hidráulica y sanitaria: la ampliación sur del Gran Canal del Desagüe, la construcción de colectores y atarjeas, el nuevo túnel de Tequisquiac y el entubamiento de algunos ríos. Sin embargo, la población siguió sufriendo inundaciones, particularmente, en los años de 1950 Y 1951.

En ese entonces muchas zonas de la ciudad fueron afectadas por el nivel que alcanzó el agua -a veces hasta siete metros- como lo revelan las fotografías de los diarios de la época, hecho que indicó la dislocación ocurrida en la red de alcantarillados y colectores.

Se realiza el drenaje profundo

Para atender esta problemática, en 1952 se creó la Comisión Hidrológica del Valle de México, dependiente de la Secretaría de Recursos Hidráulicos. Por su parte, el Departamento del Distrito Federal creó, en 1953, la Dirección General de Obras Hidráulicas; esta última dio a conocer un plan general con el propósito de hacer frente al hundimiento, a las inundaciones y al abastecimiento de agua potable. Pero no fue hasta 1959, cuando se pensó que la solución del problema sería la realización de un sistema de drenaje profundo.

Durante los años siguientes se llevaron a cabo las investigaciones encaminadas a emprender la tarea señalada: posibles trazos, estudios hidrológicos e hidráulicos y análisis geológicos de estatigrafía y de sismicidad. El proyecto comprendía la construcción de un emisor central y la de dos interceptores profundos: el central y el oriente. La profundidad de estos últimos permitiría el desagüe por gravedad a través de túneles, desde la ciudad hasta la desembocadura del sistema, en el río del Salto, cercano a la presa Requena, en Hidalgo. Así se podría mantener en servicio la red de alcantarillado y aprovechar las aguas negras para riego y usos industriales.

En el nuevo proyecto se contempló realizar estudios complementarios, y en esta tarea participó el Instituto de Ingeniería de la UNAM. Con el objetivo de garantizar y comprobar todos los cálculos teóricos se solicitó a la institución un modelo de Emisor, para verificar el funcionamiento hidráulico y el de las descargas de los colectores a los interceptores profundos, y se atendieron también los aspectos económicos y financieros. Finalmente, en 1967 se dio inicio a esta importante obra de la ingeniería mexicana del siglo XX.

Los trabajos comenzaron en las lumbreras y posteriormente se atacaron los frentes del túnel. En 1971 se creó el consorcio Túnel, S. A., conocido como TUSA; éste agrupó a los contratistas de la obra bajo un solo mando. Sobre la marcha tuvieron que enfrentar diversas dificultades, lo que produjo el desarrollo de distintas técnicas para lograr el éxito final. Particularmente, en la Ciudad de México, el túnel tenía que atravesar suelos de muy poca resistencia, pero también el avance fue difícil cuando se hicieron perforaciones en zonas de roca sólida. Los túneles que forman parte del Sistema de Drenaje Profundo alcanzaron 68 km de longitud y se revistieron de concreto armado y concreto simple. Las obras concluyeron en el año de 1975, solucionando por fin un ancestral problema de nuestra capital.

Es indudable que, a lo largo de los años, desde ese 17 de marzo de 1900 se fueron acumulando experiencias de trabajo fundamentales para el proyecto final. En el Sistema de Drenaje Profundo se pusieron en juego avanzados conocimientos y novedosas técnicas, frutos del desarrollo de la ingeniería mexicana.

Fuente: México en el tiempo No. 30 mayo-junio 1999, México Desconocido 2010/ Del desagüe del Valle de México al drenaje profundo

cementos para unir o pegar tuberias de pvc
Written by silvertubos

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RECICLAR EL AGUA
Written by silvertubos

Edificios Neutros en el uso de Agua «Net Zero Water»

Por. Pedro Paredes Estapé

Tengo presente todavía un anuncio de televisión que repetían continuamente cuando era pequeño. Se trataba de un niño que aparecía en escena cada que alguien desperdiciaba el agua y llamaba a la acción con un firme y contundente “¡Ciérrale!”. Estoy hablando de la década de 1980. Desde entonces, el agua ha sido motivo de preocupación para muchos de mi generación, y seguramente lo será de las futuras.

A pesar de nuestras preocupaciones, el agua no deja de ser un recurso renovable. Es la misma en nuestro planeta desde su conformación. A través de un ciclo constante y continuo de evaporación y condensación, ha moldeado cordilleras, definido continentes y ha estado presente en el desarrollo de todas las formas de vida. Esto significa que hoy en día podemos afirmar que estamos prácticamente tomando la misma agua que alguna vez tomó un dinosaurio.

La cantidad de agua existente actualmente cubre más de 75 % de la superficie terrestre, y los elementos que la componen, el Oxígeno y el Hidrógeno, se encuentran disponibles en altas cantidades en nuestro planeta. De los 145 billones de metros cúbicos de agua, 72 % se evapotranspira y regresa a la atmósfera, 21 % corre por los ríos o arroyos, y 7 % restante se infiltra al subsuelo de forma natural recargando los mantos acuíferos.

Entonces, ¿por qué la crisis de disponibilidad de agua? Porque el agua dulce, apta para consumo humano, se encuentra concentrada principalmente en glaciares o congelada en los polos. Una pequeña fracción, menos de 2 % del agua dulce, se encuentra en depósitos subterráneos, algunos alcanzables, otros no, y con pocas fuentes superficiales de agua potable.

El problema se agudiza cuando 40 % del agua es desperdiciada durante el proceso de distribución en la ciudades de México, según el Consejo Consultivo del Agua, y solo 48 % de las aguas residuales generadas se trata antes de descargarla en cuencas (no se sabe si se hace cumpliendo la normativa vigente).

Según evaluaciones de la calidad del agua superficial, 23 % de ésta se encuentra contaminada y, en Jalisco, 45 % presenta Coliformes Fecales en concentraciones mayores a 10 mil (NMP/100 ml), cifras superados por las aguas del Valle de México, con más de 70 %, mientras que el promedio nacional es de 28 %.

Una estrategia clave para la solución de este problema es atenderlo desde el origen, desde los edificios donde mayormente se contamina al utilizarla. Lo ideal sería tener edificios neutros en el uso de agua (o Net Zero Water), lo cual significa que en el edificio sólo se consume el agua que se capta o se trata (se produce) en sitio, logrando un equilibrio sostenible entre la disponibilidad y la demanda de agua. Para lograr este objetivo, es necesario utilizar fuentes alternativas de agua para satisfacer todas las necesidades del edificio y tratar todas las aguas residuales descargadas en el lugar, haciendo un plan de aprovechamiento.

Para el International Living Future Institute, el balance de agua neto cero es igual al total de agua demandada, menos el agua de fuentes alternativas, como captaci.n pluvial, y el agua que se devuelve a su fuente original, como la infiltración al subsuelo.

Esta solución suena lógica y natural, pero sigue habiendo poco impulso a este tipo de edificaciones neutras en el uso del agua. Uno de los principales límites es el legal, desde la Constitución Mexicana, que establece que todos los municipios del país están obligados a entregar agua potable, hasta la normativa para la calidad del agua resultante del tratamiento, como la NOM-003-SEMARNAT-1997.

Suceden dos fenómenos. Por un lado, se le da al Ayuntamiento la responsabilidad de ser el único proveedor de agua potable y, por otro, se limita el uso de agua tratada para el consumo humano. Esta cultura permea en diferentes niveles del proceso de diseño, limitando la asequibilidad de un edificio neutro en el uso de agua. Por el otro, está la fecha de emisión de las principales normativas para el uso de agua tratada. Todas son del siglo pasado y ninguna regula el uso de agua de lluvia, salvo el proyecto PROY-NMX-AA-168-SCFI-2012, diseñado para localidades donde los municipios no puedan entregar agua potable.

La solución actual propuesta en los edificios sustentables, incluidos aquellos en proceso de certificación, es tratar las aguas residuales que se generan en sitio para reutilizarla en riego de áreas verdes (si es que se tienen), y en mingitorios o tasas de baño exclusivamente. Se pierde el potencial de potabilizarla y usarla también para lavamanos, cocina o regadera. Algunos proyectos como Torre Glorieta, en la Ciudad de México, llevan más allá este concepto y utilizan el agua captada de lluvia. Luego de filtrarla y potabilizarla, la incorporan a la cisterna general, evitando gastos adicionales en infraestructura y reduciendo la demanda de agua potable del edificio
en más de 85 %.

¿Qué falta para llegar a Net Zero Water?

Los proyectos que buscan un alto desempeño en el consumo de agua se enfrentan a una preconcepción generalizada de que el agua tratada, una vez potabilizada, no puede usarse dentro del edificio para otro fin que no sea riego o sanitarios. Y no solo esto: la metodología de cálculo exigida por las autoridades locales inhibe prácticas de ahorro de agua. Un ejemplo es el Sistema Intermunicipal de los servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA), que estima la capacidad de tratamiento de una planta en 80 % del gasto total del proyecto, y este a su vez está ligado directamente a los criterios de diseño del mismo organismo, que suele ser 1.6 veces más que un edificio con certificación básica o hasta dos veces más que uno de alto desempeño. Entonces, la planta de tratamiento de aguas residuales se suele sobredimensionar en capacidad y, por tanto, en costo para cumplir con la normativa.

Para atender la crisis de acceso al agua potable que se avecina, es indispensable actualizar las normativas para aprovechar al máximo el uso de agua tratada y fomentar la captación de agua de lluvia para el consumo humano. Estas actualizaciones deben venir junto con mejores sistemas para la potabilización, que están fundamentados en estudios de calidad asequibles y viables a nivel de laboratorio para asegurar la salud de las personas. Al final del día, la cuestión sigue vigente: ¿se trata solo de “cerrarle” o de hacer algo más?

Pedro Paredes Estapé es arquitecto por el ITESO y acreditado como LEED AP, desde 2009. Obtuvo el diploma en Arquitectura Bioclimática por la ESArq en 2011. Es acreditado como experto EDGE desde 2017. Profesor de Asignatura en el ITESO desde 2012. Se desempeña como socio y director Ejecutivo de Eosis, empresa de consultoría para certificación LEED, con más de 75 proyectos entre México y Latinoamérica.

Fuente: Revista Especificar

BLOG DE TUBERIA NOM NMX
Written by silvertubos

Conoces la normativa aplicable para instalaciones hidráulicas y sanitarias?

La normativa mexicana aplicable a la construcción en general es muy amplia; no obstante, la que se relaciona con la vivienda está plasmada en el Código de Edificación de Vivienda (CEV), que se elaboró mediante iniciativa de la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI), con base en el artículo 72 de la Ley de Vivienda, refiriéndose al CEV como un “modelo normativo”.

Este código –ya en su tercera versión publicada en 2017– incluye en la parte octava (capítulos 42 al 47) las disposiciones técnicas normativas relacionadas con las instalaciones hidráulicas y sanitarias. En este Código se incluyen, además, las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) y las Normas Mexicanas (NMX). Es importante destacar que la Ley Federal sobre Metrología y Normalización (LFMyN) establece que las NOM son de observancia obligatoria, mientras que las NMX son voluntarias, según la elabore un organismo nacional de normalización o la Secretaría de Economía, además de que son aplicables a producto, proceso, instalación o sistema. Pese a lo establecido en la LFMyN, si una NMX llega a ser referenciada en algún código o reglamento, su estatuto pasa a ser de observancia obligatoria.

Hablando específicamente de las normas relacionadas con las instalaciones hidráulicas y sanitarias, las NOM son desarrolladas principalmente por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Secretaría de Salud y la Secretaría de Economía. Algunas de ellas están relacionadas con la infraestructura hidráulica, la calidad del agua, el uso y su consumo (ver Tabla).

Tabla nom y nmx instalaciones hidrosanitarias
Tabla nom y nmx instalaciones hidrosanitarias

Medidas para brindar instalaciones hidrosanitarias de calidad

Las NMX, por su parte, se desarrollan con el fin de atender a las necesidades de la industria, de manera que cuenten con una certificación en donde se indiquen sus características y se asegure su calidad, objetivo primario de contar con una norma, si bien lateralmente también contribuye a generar un mercado competitivo.

Por otro lado, si tomamos en consideración las exigencias de la construcción sustentable, el desarrollo y la innovación tecnológica de los últimos años y las tendencias, las normas existentes en México son insuficientes para el caso de estas instalaciones. Lo que en ocasiones no se comprende, y que se aprecia en el sector, son los objetivos de las normas. La evaluación de la conformidad, la certificación o verificación y, en su caso, los resultados de un laboratorio acreditado sirven para el cumplimiento y aplicación de las normas.


Así que no se debe forzar su cumplimiento a petición de una autoridad o para la posible recepción de incentivos. La industria debe reconocer que estos procesos garantizan que el producto cuenta con estándares de calidad mínimos, rasgo que los hace competitivos frente a las diferentes marcas. Desde luego hay muchos puntos que todavía faltan por normalizar, que aportan a identificar una construcción sustentable de parámetros nacionales; es decir, criterios técnicos que ya se consideran para la edificación sustentable extranjera. En las prácticas globales, las nuevas normas han servido para contar con indicadores de desempeño de la eficiencia en el uso del recurso acuífero, su manejo, calidad y tratamiento, así como conceptos de energía, medio ambiente y residuos sólidos.

En el caso de las normas para vivienda destaca la NMX-AA-176-SCFI- 2015 Instalaciones hidrosanitarias para la edificación de vivienda-especificaciones y métodos de ensayo, que fue coordinada y desarrollada por la Conagua, y que se diseñó específicamente para la vivienda, aunque todavía no se ha considerado su cumplimiento obligatorio (ver Tabla).

En México, en el sector vivienda ha habido muchas iniciativas, como la Política Nacional de Vivienda, así como el caso de “Hipoteca Verde” de Infonavit, además de los subsidios de la Comisión Nacional de Vivienda. Esto contribuyó a avanzar no solamente en la normalización, sino en el reconocimiento de las certificaciones de los productos para garantizar que desde esa instancia las viviendas tengan un mejor desempeño.

En este sentido, los Organismos Nacionales de Vivienda (Onavis) y la Conavi trabajan estrechamente con los desarrolladores para generar conocimiento y conciencia sobre el beneficio y lo que representa el cumplimiento de la normatividad. Esta parte es esencial en los requisitos obligatorios de los programas generados dentro de la Política de Vivienda.

Por lo anterior, es necesario seguir promoviendo el conocimiento normativo y el involucramiento general de la industria de la construcción en los grupos de trabajo para el desarrollo de normas, así como la responsabilidad ante la regulación de la construcción, llámese Código o Reglamento de Construcción. El diseñador, constructor, productor, comercializador, los propietarios y los gobiernos locales, así como los futuros profesionales, deben involucrarse más y conocer mejor la regulación, pues ésta es la base de una vivienda de calidad.

Un modo de comenzar este cambio es promover la modernización administrativa de los gobiernos locales, pues son actores clave para el desarrollo tecnológico y normativo de las construcciones. Por otro lado, la industria de la vivienda debe capacitarse en el conocimiento de las regulaciones y comprometerse a elevar la calidad de sus productos y servicios, además de continuar participando activamente en el desarrollo de normas y códigos.

Para incentivar el cumplimiento de la normatividad -no solamente relacionado con las instalaciones hidráulicas y sanitarias, ya que todas ellas forman parte de la construcción de vivienda- es necesario continuar difundiendo y promoviendo el conocimiento de los objetivos y beneficios del desarrollo normativo, su cumplimiento y aplicación, desde las diferentes representaciones de la construcción. Asimismo, es importante generar programas académicos para los futuros profesionales, y diseñar programas específicos de certificación de las construcciones, con los que se podrían otorgar incentivos fiscales por su obtención, pues la industria de la construcción es uno de los grandes aliados en el desarrollo

Fuente del artículo. Revista Especificar

Escrito por. Evangelina Hirata Nagasako es arquitecta por la Universidad Nacional Autónoma de México, con estudios de Posgrado en Diseño Urbano en Japón, España y México; y especialidad en Valuación Inmobiliaria. Actualmente, es directora General del Organismo Nacional de Normalización y Certificación de la Construcción y Edificación, S.C. (ONNCCE); y miembro fundador de Calidad y Sustentabilidad en la Edificación, A.C. (CASEDI)..

Lavando-industria
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10 Recomendaciones para ahorrar agua en nuestra empresa o industria!

En varias ocasiones hemos encontrado artículos acerca de cómo realizar un consumo responsable del agua en el hogar. Hoy también vamos a centrarnos en un consumo medio-ambientalmente adecuado pero cambiando de contexto: nos preguntamos cómo ahorrar agua nuestro lugar de trabajo.

En determinados sectores de actividad como es el caso del sector de la alimentación, del sector químico, de las empresas de construcción… el agua es una parte importante del presupuesto de gastos mensual. En este sentido es tan imprescindible asegurarnos tanto de que la calidad del agua es la adecuada como de que realizamos un consumo responsable del agua. 

Las medidas que se pueden tomar para ahorrar agua son variadas y solo tendrán un efecto positivo sobre los costos, sin sacrificar en absoluto la calidad del agua. A la vez, esto tiene también un impacto positivo sobre la imagen de la marca, siendo este un comportamiento responsable con el medio ambiente y el entorno, algo que sin duda será valorado positivamente por los clientes y sociedad en general.

Estudio inicial e implicación del personal

Cómo ahorrar agua en la empresa, empieza por realizar un estudio que determine cuánta agua se consume y para qué es utilizada, así como cuándo se utiliza -puede haber momentos de mayor consumo- quién la utiliza y de qué modo además de en qué zonas de la empresa se realiza este consumo.

En el ámbito industrial y empresarial, los lugares donde el consumo de agua suele ser mayor son los baños, cocinas lavanderías, instalaciones industriales… (maquinaria, sistemas de refrigeración y calefacción, limpieza de aparatos, etc…). 

Tras la realización de este estudio, el contador del agua será la prueba numérica del consumo y servirá de base para calcular el promedio de consumo por empleado, actividad o zona de la empresa.

Este estudio debe además servir para detectar posibles problemas en la instalación, como filtraciones o fugas así como usos indebidos observados por parte del personal (llaves abiertas, consumo excesivo de agua en alguna parte del proceso, etc…).

El ahorro de agua en la empresa requiere de la contribución del personal, por lo que es importante comunicarles en qué va a consistir el estudio y el plan y por qué es importante, solicitando su compromiso para una puesta en práctica correcta.

Los cambios de hábitos suelen implicar incomodidades, por lo que es importante ofrecerles información actualizada sobre el proceso y darles un tiempo de adaptación, además de facilitar las herramientas y técnicas necesarias para los nuevos objetivos de consumo de agua. Por otro lado, no hay que olvidar hacer partícipe del éxito a los empleados cuya colaboración es esencial para unos resultados satisfactorios.

10 Recomendaciones para el ahorro del agua en nuestra empresa o industria

  1. Reducción del uso de sustancias químicas que permitan reutilizar el agua.
  2. Conocer el tipo de aguas residuales para que sea posible su reutilización a través de procesos de tratamiento de aguas y tratamiento de aguas residuales.
  3. Uso eficiente de la maquinaria, como lavavajillas, lavadoras, etc… poniéndose en marcha en su máxima capacidad y en el programa más adecuado para cada carga.
  4. Potenciar los sistemas de limpieza en seco, como barrer o aspirar.
  5. Ajustar la presión del agua para ofrecer los niveles de presión necesarios para una utilización eficiente sin sobrepasar el consumo con una presión demasiado alta.
  6. Reparar cualquier fuga, filtración o evaporación.
  7. Optar por aguas no potables para el uso industrial.
  8. Contar con sensores de control por infarrojos en las llaves y cisternas que eviten pérdidas por descuidos.
  9. Optimizar el uso de aparatos de refrigeración y calefacción.
  10. Utilizar sistemas de riego automático.

Control y seguimiento

El último paso para una política de ahorro de agua eficiente es el control y seguimiento, implementando un sistema de medición que garantice el cumplimiento de las medidas establecidas y evaluando su resultado.

Muchas veces puede ser posible llevar a cabo este plan de forma interna desde la empresa. En otros casos, contar con ayuda externa y con una fuente imparcial puede garantizar una solución más objetiva para el ahorro eficiente en el consumo, lo que además ofrecerá la ventajas que implica contar con el asesoramiento técnico de un profesional con un amplio conocimiento sobre las herramientas y técnicas más adecuadas.

fuente del artículo: Culligan® Barcelona

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